ESCUCHA HIJO

Escucha hijo: voy a decirte esto mientras duermes, quiero que sepas que me hubiese gustado que estuvieras despierto, pero no pense en la hora y ya en tu cuarto, te veo dormido con una manito metida bajo la mejilla, tu cabello alborotado y una carita de yo ni fui, de lo más bella. Quiero confesarte que hace unos minutos mientras leía un libro y sin poder concentrarme, sentí un escalofrío y una ola de remordimiento que me ahogaba, así que levantándome de un salto corrí a tu cuarto para contarte lo que me ocurría y te encontré dormido, pero a pesar de que estas dormido quiero que me escuches lo que me hacia sentir tan mal, fíjate:

Hoy me enojé contigo. Te regañé cuando te vestías para ir al colegio porque no te habías cepillado los dientes y aún tenías mojada la cara... Te regañé porque no limpiaste los zapatos... Te grite porque dejaste caer algo al suelo...

Durante el desayuno te regañé también...Volcaste las cosas...Tragaste la comida sin cuidado...Pusiste los codos sobre la mesa...Untaste demasiada mantequilla en el Pan...Y cuando te ibas ya a la escuela con tu mamá, te volviste y me saludaste con la mano y dijiste: "Adiós, papi" y yo fruncí el ceño y te respondí: "Ten cuidado, pórtate bien".

Al caer la tarde todo empezó de nuevo. Cuando me acercaba a casa te vi jugando en la calle...Tenías roto el pantalón en las rodillas...Te humillé ante tus amiguitos al hacerte marchar a casa delante de mí, a medida que te iba diciendo "sí tuvieras que comprar tú los pantalones, los cuidarías más,..¡¡Debes ser más cuidadoso!!"...¡¡Que barbaridad, hijo, pensar que un padre diga eso!!...

Recuerdo, también que cuando yo leía el periódico, fuiste hasta mí, tímidamente, con una mirada de perseguido...y cuando levanté la vista del diario, impaciente por la interrupción, vacilaste en abrazarme, cuando te dije bruscamente..."¿Y ahora que quieres?"........Nada, respondiste, pero te lanzaste en tempestuosa carrera.... me echaste los brazos al cuello y me besaste, mientras tus brazitos me apretaban con un cariño que Dios había hecho florecer en tu corazón y que ni aún el descuido de padre hacia ti, puede agotar...luego de eso, pediste la bendición y te fuiste a dormir, con breves pasitos a tu cuarto...

Bien, hijo; poco después fue cuando me entró ese sentimiento de culpabilidad, por mi comportamiento hacia ti, por mi terrible costumbre de encontrar defectos, de siempre reprender.....Y me preguntaba, "¿es esa mi recompensa a ti por ser un niño?"...Pero quiero que sepas, hijo, que no era que yo no te amara; era que esperaba demasiado de tí...Te media con la vara de mis años maduros.

Y hay tanto de bueno y de bello...y de recto en tu carácter, hijo!!!...Ese corazoncito tuyo es tan grande como el Sol que nace cada mañana......Así lo demostraste con tu espontaneó impulso de correr a besarme......Nada más importante ésta noche, hijo,...He llegado hasta tu cama en la oscuridad y me he arrodillado, lleno de vergüenza....

Es una pobre expiación; sé que no comprenderías estas cosas si te las dijera cuando estás despierto...Pero mañana, seré un verdadero Padre...Seré tu compañero y sufriré cuando sufras, y reiré cuando rías...Me morderé la lengua cuando esté por pronunciar palabras impacientes...Me repetiré como si fuera un ritual...: "¡¡¡No es más que un niño!!!"... "No es más que un niño"...¡¡¡Es mi hijo!!!...

Temo haberte imaginado hombre...Pero al verte ahora...acurrucado,...fatigado en tu cama,......veo que eres un bebe todavía...Tan solo ayer estabas en los brazos de tu mamá, con la cabeza en su hombro, sacándote los gases.....Y ahora...ahora...je!!!...¡¡He pedido demasiado!!...Te prometo que cambiaré...

¡¡¡TE QUIERO MUCHO, HIJO!!!

Arriba

Dile a tus amigos!
Escribe tu nombre:

Escribe tu E-mail:

E-mail de tus amigos:

Tus Comentarios:

Recibir copia: 



| Mensajes |  | Página Principal |